Proyecto Chino Amenaza a Culturas Indígenas y Biodiversidad
La Moskitia es una selva tropical magnífica y la más extensiva que existe en Latinoamérica después de las Amazonas. Los pueblos indígenas que viven allí están luchando cada día para mantenerla así.
Desde hace 3.000 años, los indígenas han vivido en esta tierra, remando en canoas para subir y bajar por el Río Patuca, la arteria central de la selva tropical de La Moskitia, que cubre todas las tierras bajas de Honduras. En las fértiles planicies aluviales, cultivan cacao, naranjas, arroz, fríjol, yuca, y otras cosechas por su subsistencia y para el comercio. Los peces proveen una fuente clave de proteína. “El rió es nuestra vida,” manifiesta Lorenzo Tinglas, presidente del consejo regional del pueblo tawahka. “Amenazar al Río Patuca es amenazar a cuatro pueblos indígenas—Tawahka, Pech, Miskitu, y Garífuna—y vamos a luchar hasta la muerte para defenderlo.”
El momento llegó. En enero, el gobierno de Honduras aprobó un contrato con una empresa china para la construcción de la primera de tres represas en el Río Patuca. En febrero, los cuatro pueblos indígenas y afro-caribeños que comparten la región llamada Moskitia formaron un frente unido para salvar al río. Eso significa salvar sus recursos naturales, el bienestar de sus familias, y la supervivencia de sus culturas. La Moskitia es un tesoro al nivel mundial. Se necesita de apoyo internacional para frenar este proyecto. Por favor, escriba una carta hoy. Gracias.
USTED PUEDE AYUDAR!
Cuáles consecuencias traería la instalación de represas hidroeléctricas en el Río Patuca? Para Norvin Goff, líder de la organización miskitu más grande, la respuesta es clara: “Represas en el Río Patuca significan ecocidio y homicidio.”
Por qué ecocidio?
La presencia de represas hidroeléctricas en la selva tropical de La Moskitia arrasaría con la diversidad y riqueza del ecosistema y traería impactos—directos e indirectos. El río cuenta con varias especies de pez que suben el río cada año, migrando desde el mar hasta las cabeceras del río. Con la construcción de represas que bloquean su camino, estas especies de pez se extinguirían localmente. Además se alteraría el balance de la ecología del río. Corriente abajo, las represas causarían cambios en el volumen, flujo y la temperatura del río, lo que afectaría a los animales y plantas acuáticas y a las terrestres que están a orillas del río. Corriente arriba, los embalses hundirían la vegetación del bosque tropical, causando la emisión de metano durante décadas y acelerando el proceso de calentamiento global. Los embalses y las carreteras que construirían durante las primeras fases obstaculizarían los patrones de migración de cientos de especies del bosque tropical. Esto incluye animales en vías de extinción como el jaguar y el tapir, cuya supervivencia depende de tener territorios anchos y abiertos, libre de obras grandes como las represas hidroeléctricas.
Por qué homicidio?
Los habitantes indígenas que viven a las orillas del Río Patuca dependen del río para su bienestar y supervivencia. Es el único medio de transporte y comunicación en La Moskitia—una región sin carreteras ni calles. Así, las represas taparían el único medio de acceso para las miles de personas que usan el río para el comercio intercomunitario y regional. En los trechos del río entre las tres represas, el flujo, corriente, y canales cambiarían. Al cambiar estas características, los pueblos que han dependido por siglos de su conocimiento del Patuca, perderían este conocimiento. Peces desaparecerían. Los ciclos de inundación que traen nutrientes a las tierras agrícolas perderían su ritmo. La construcción de carreteras en esta selva tropical traería la invasión de personas y empresas no-indígenas, la tala de árboles, caza furtiva, toma de tierras, y el narcotráfico. “Estos impactos matarán la supervivencia del Tawahka como un pueblo único,” dice el líder elegido, Lorenzo Tinglas.
Por haber firmado la declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de Pueblos Indígenas, y el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo, Honduras reconoce oficialmente el derecho de los pueblos indígenas al consentimiento libre, previo, informado y consensuado (fuera posible aprobado) para proyectos que los afectan. Pero los pueblos indígenas no han dado su consentimiento a la construcción de represas en el Río Patuca.
Por favor, conteste el llamado de los pueblos indígenas de La Moskitia, unidos en fuerza. Dígale al presidente de Honduras que no tiene derecho a construir la Patuca III mientras que los pueblos indígenas de la Moskitia se oponen.
Photo Credit: 1) Flickr ID Compartuser 2) Kendra McSweeney